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Integrantes de la Comisión de Biblioteca y Asuntos Editoriales, que preside el senador Zoé Robledo Aburto, se comprometieron a impulsar y promover la lectura, porque es “un hábito que ha estado rezagado por falta de estímulos”.

“Desde aquí --anunció el legislador perredista-- se promoverán proyectos legislativos, académicos, culturales y de divulgación para que el Senado cuente con mejor información para su labor sustantiva y aporte a las instituciones públicas y ciudadanos obras que hagan comprender mejor el papel que desarrolla en la vida nacional”.

Agregó que los senadores “tenemos el honor y la responsabilidad de velar por el acervo histórico contenido en la biblioteca Melchor Ocampo, fundada hace 42 años, con la colección bibliográfica del último constituyente de 1917, el profesor Jesús Romero Flores, quien dedicó sus últimos años de vida a ampliarla y enriquecerla”.

Al declarar formalmente instalada dicha Comisión, Robledo Aburto hizo notar que “sobre los hombros de estos gigantes estamos parados y tenemos que responder de cara a la sociedad”.

Pero además, puntualizó, nos corresponde el resguardo, tratamiento y difusión de los documentos de información jurídica y parlamentaria del acervo senatorial y tenemos el reto de incidir en la percepción pública sobre el trabajo legislativo de los senadores.

El senador por Chiapas expresó su confianza en que las casas editoriales privadas serán grandes aliadas de la Comisión para coadyuvar a aumentar el hábito de la lectura entre los mexicanos, sobre todo en los niños.

Al respecto, mencionó que según estadísticas sólo el 24 por ciento de la población acepta haber leído un libro durante el año anterior y menos del 25 por ciento haber asistido a una biblioteca.

Por su parte, la senadora panista Laura Angélica Rojas Hernández coincidió en que es el momento oportuno de proponer nuevas formas de difusión del trabajo legislativo y hacerlo llegar de manera más amigable, accesible y sencilla a la ciudadanía, sobre todo a los niños y adolescentes.

Es oportunidad, añadió, no sólo de hacer libros especializados para investigadores, académicos, científicos y politólogos, sino también para los ciudadanos comunes, a fin de que conozcan todo lo relativo al quehacer parlamentario.

A su vez, el senador priista Daniel Amador Gaxiola opinó que será fundamental la participación de los diversos grupos parlamentarios para abrir la biblioteca del Senado a la ciudadanía y a un mayor número de editorialistas, escritores y académicos, además de ir al día respecto al avance de las nuevas tecnologías en la materia.

A la instalación asistieron Carla Templos Núñez, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM; Fernando Valdez, director del Departamento de Coediciones de la Editorial Plaza Valdez; José Luis Martínez Garza, director de Vinculación de la PGR; Oscar Saavedra, presidente de la Asociación Mexicana de Bibliotecarios y Ricardo Montes Gómez, director de la Biblioteca Melchor Ocampo del Senado.

 

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