México debe elevar su producción de granos para que no siga dependiendo de otros países para garantizar la autosuficiencia alimentaria, ya que en promedio  importa el 43 por ciento de alimentos que demanda la población, así lo señaló el Senador Francisco Salvador López Brito, coordinador de Desarrollo Rural del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN).

El Senador López Brito señaló que de acuerdo a datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), no obstante a que México ocupa a nivel mundial el lugar 14 como productor agropecuario, compra a otros países la tercera parte del maíz que comemos; la mitad del trigo, 80 por ciento del arroz y entre 30 y 50 por ciento del frijol, así como poco más de 30 por ciento de la leche en polvo que demanda la población.

En el marco del 1er Foro Regional con Vocación Territorial de Granos, organizado por el Ejecutivo Federal, en Culiacán, Sinaloa, ejemplificó que en el caso del maíz, un grano básico en nuestra dieta, del que se producen 21 millones de toneladas al año, se importan aproximadamente 10 millones.

Reflexionó que en un contexto de mercado de comercio global, ningún país tiene soberanía alimentaria, producen algunos bienes e importan otros, pero en el caso de México estamos produciendo tan sólo el 57 por ciento de los alimentos que consumimos, por lo que al menos debemos aspirar a un 75 por ciento que recomienda la FAO.

El legislador sinaloense indicó que no se deben descuidar los cultivos estratégicos, como son el maíz, arroz y trigo.

Destacó que el gobierno debe invertir en bienes públicos para el almacenamiento de granos y oleaginosas, ya que son determinantes tanto en la calidad como en la cantidad ofertada, y su carencia causa en promedio 25% de las pérdidas por plagas poscosecha. Además, apuntó se está obligado hacerlo de manera veloz, ya que los países avanzados, tras superar esta etapa,  están enfocados en incidir en políticas de disminución de costos operativos y agregación de valor, a fin de lograr actividades económicas más competitivas y eficientes.

Puntualizó que se debe impulsar el perfeccionamiento de los canales de distribución y apoyar la construcción de bodegas rurales y caminos para que ya no se siga perdiendo el 35 por ciento de los alimentos que producimos, por falta de condiciones adecuadas de transporte o almacenaje.

López Brito propuso al Ejecutivo Federal el impulsar políticas públicas diferenciadas de acuerdo a la población objetivo, a efecto de que el 10% de los agroempresarios de clase mundial mantengan sus niveles de competitividad y por otro lado, que acerquen al mercado a los pequeños productores, para lo cual se deberán fortalecer esquemas de financiamiento, asociacionismo, semillas mejoradas, métodos más eficientes de siembra y capacitación, entre otros.

Indicó que se debe hacer accesible la tecnología para elevar la productividad de agricultores, generar un  nuevo modelo de  extensionismo rural, mediante el cual  Técnicos Certificados  y capacitados en los últimos avances tecnológicos y científicos del sector se enfoquen a elevar la productividad del campo, al acercarle al productor la información, insumos y canales de distribución que le permiten obtener rendimientos altos y estables de sus cosechas, incrementar su ingreso e incluso ayudar a mitigar los efectos del cambio climático.

López Brito enfatizó que la falta de tecnificación y de capacitación no puede seguir siendo el pretexto por el cual algunos Estados obtengan más de 10 toneladas de rendimiento por hectáreas y otros apenas alcancen las 3 toneladas, por lo que la reforma al campo debe hacer accesible la tecnología, y fomentar la tecnificación de riego a los productores.


---000---