* Intervención de la senadora Blanca Alcalá Ruiz, presidenta del Parlamento Latinoamericano, durante la inauguración de la Reunión de Comisiones del Parlatino, efectuada en las instalaciones del Senado de la República, el viernes 25 de septiembre de 2015.
Muy distinguido señor senador Roberto Gil Zuarth,
presidente de la Mesa Directiva del Senado mexicano, gracias por tu presencia y compañía;
Saludo del mismo modo a la senadora Mariana Gómez del Campo, vicepresidenta del Parlamento Latinoamericano;
A quienes esta mañana han viajado muchas horas para poder presidir las comisiones que tienen a su cargo, a mi amigo el diputado Rodrigo Cabezas, presidente de la Comisión de Asuntos Económicos; al diputado Issa kort, presidente de la Comisión de Energía y Mina, quien viene desde Chile; al diputado José Carlos Cardoso, presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca, quien viene desde el Uruguay; a la asambleísta Esthela Acero, presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas y Etnias, quien viene desde el Ecuador.
Por supuesto, también, al secretario alterno de comisiones, al diputado Roy Daza, desde Venezuela; y a quienes también nos acompañan esta mañana, a don Fernando Soto, como aquí ya se ha presentado, el representante de la FAO en México; al señor licenciado don Francisco Arroyo, quien viene con la representación de la Cancillería; por supuesto a la estimada embajadora Morgan Sotomayor, quien conoce muy bien la región de América Latina y El Caribe.
Quiero destacar del mismo modo la presencia de mis compañeras y compañeros senadores mexicanos, integrantes todos del Parlamento Latinoamericano; y también del propio presidente de COPA, otra de las organizaciones que tiene que ver con la participación de los legisladores en toda nuestra región.
Por supuesto, a todas y a todos ustedes, sean muy bienvenidos.
Quisiera, primero, agradecer al señor presidente del Senado su respaldo por hacer posible los trabajos de las comisiones del Parlamento Latinoamericano, precisamente aquí en México; reconocer en su dirección el espíritu democrático que alienta los trabajos del Senado mexicano, pero también su convicción de renovar la aspiración de una sola patria, de una región del país.
Por supuesto, a mi amiga, la senadora Mariana Gómez del Campo, que como vicepresidenta por México, ha venido realizando en estos años un trabajo serio, puntual, coordinando la participación de los legisladores mexicanos en nuestro foro, pero también imprimiendo en el debate aportaciones valiosas en favor de la libertad, la integración y el desarrollo, reflejo fiel del dinamismo que le caracteriza y sobre todo del compromiso que tiene con la región y con su patria.
La propia senadora Gómez del Campo ha realizado ya un resumen muy apretado de algunas de las tareas del Parlamento Latinoamericano. Permítanme a mí hacer una reflexión, primero, por el orgullo que representa que precisamente las comisiones se realicen aquí, en México, en mí país de origen.
Con ello, poder hacerlo en el marco de lo que esta mañana ocurre en nuestra región y ocurre también como referente del mundo.
Precisamente en este momento ha iniciado la Cumbre de Naciones Unidas, que tendrá que discutir qué es lo que va a ocurrir para nuestros pueblos, para el mundo entero en la próxima agenda 20-30, y qué mejor oportunidad que podamos hacer coincidir la temática de cada una de nuestras comisiones, con los retos y desafíos que enfrenta América Latina y El Caribe.
Como se ha señalado, iniciamos este trabajo en un ambiente de enorme volatilidad, de enormes desafíos en el tema de la agricultura; de enormes retos para la participación política de las mujeres y, sin duda, esto se ve reflejado en la agenda que cada uno de los presidentes de las comisiones ha confeccionado para desarrollar esta mañana.
Se trata de objetivos inclusive mucho más ambiciosos que los que veníamos realizando. Objetivos en donde lo que estamos buscando es cómo erradicar la pobreza, cómo poner fin al hambre, cómo garantizar una vida saludable, cómo lograr tener una educación de calidad; cómo hacer que efectivamente exista la igualdad de géneros, la disponibilidad y sustentabilidad del agua; cómo poder tener acceso a energías limpias, además de tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Cómo conservar los océanos; cómo lograr proteger y restaurar los ecosistemas, combatir la degradación de la tierra y frenar la pérdida de la diversidad biológica.
Esto se está discutiendo en Naciones Unidas y esto se está discutiendo aquí en México, por las comisiones del Parlamento Latinoamericano.
Me parece que sin duda representa ello una muy feliz coincidencia, pero también un enorme desafío.
El tema de la innovación tecnológica, por ejemplo, está asociada a la degradación de los suelos, a la restauración de los ecosistemas, a la forma de generar una mayor capacidad de producción de alimentos. Y por ello, también me complace mucho que esta mañana la participación de la FAO y del propi IICA, nos permita poder construir las sinergias que se requieren para hacer del conocimiento la mejor herramienta para construir las leyes adecuadas, las instituciones pertinentes y las soluciones que nuestros pueblos están demandando.
De eso se trata, señor presidente, el trabajo que venimos realizando en el Parlamento Latinoamericano.
Efectivamente, para mí es muy honroso que desde hace varios meses, de manera unánime, se haya manifestado y conformado una planilla que nos permite la representación plural y además representativa de todos los países de la región.
A partir de entonces hemos venido construyendo con la participación sumamente activa de todos los legisladores de América Latina y El Caribe, un programa de trabajo a partir de cinco ejes: primero, porque 51 años después de haberse construido el Parlamento Latinoamericano, nos hemos dado cuenta que necesitamos fortalecer nuestra institución, que necesitamos atrevernos a innovarla, y en ello sin duda la propia reforma de estatutos y de reglamentos ha sido parte de los trabajos que se vienen realizando a partir de mayo pasado.
Por otro lado, compartirles que también nos dimos a la tarea de poder identificar los vínculos que hicieran mucho más estrecha y sobre todo mucho más efectiva la relación del Parlatino con todas las agencias de Naciones Unidas, con el resto de los organismos parlamentarios que existen en la región y en el mundo.
Por ello, celebro que tan solo esta mañana, además de la participación –como he señalado- de la propia Organización Mundial de Alimentos, estará con nosotros también la Organización de Naciones Unidas para la Mujer, discutiendo y abordando lo que queremos aportarle a la región, la norma marco en materia de democracia partidaria.
En el Parlatino sabemos que nuestro interés es poder tener y hacer elevar la voz de la región en los temas de la agenda global, y en ello compartirles que hemos dado pasos sólidos tan solo en un tema en el que el Senado mexicano –dicho sea de paso- ha puesto un especial énfasis, como es el caso del cambio climático.
Hemos iniciado ya una recopilación de los aportes legislativos que en toda la región se vienen realizando en materia legislativa, y en breve habremos de presentar para consideración de la propia Cumbre en Materia de Cambio Climático, cuáles han sido los aportes, cuál es el balance que en América Latina y El Caribe existe en la materia y cuál es el compromiso que hacia adelante nos proponemos realizar.
Por si esto fuera poco, en el caso del Parlatino nos hemos propuesto poner un sello de innovación a través de dos herramientas fundamentales. Una de ellas, señor presidente, con el apoyo del Senado mexicano, como es el caso del Parlatino Web TV.
Hoy mismo esta ceremonia y el resto de nuestros trabajos estarán siendo transmitidos a través de la vía de televisión.
Nuestros ciudadanos, aquellos electores que nos votaron, aquellos a quienes tenemos que rendir cuentas, estarán conociendo qué es lo que estamos discutiendo, qué es lo que estamos aportando y, sobre todo, qué es a lo que nos estamos comprometiendo.
Nos parece que en cada uno de nuestros países el tema de la rendición de cuentas va más allá de lo que implica la formulación de las leyes, el ejercicio cotidiano de sus legisladores, que quienes hacemos estas leyes, lo hacemos de cara a los ciudadanos.
Finalmente, compartirles que hemos decidido con el apoyo de todas y todos, poder ir construyendo la comunidad parlamentaria del conocimiento; sin duda, la participación de los legisladores, la interrelación con quienes están al frente del Poder Ejecutivo; la participación valiosa de académicos -que tan solo esta mañana, incluso también nos acompaña el doctor Guillermo Aarón Sánchez, rector de la Universidad de Occidente de México-, forma parte de los esfuerzos que estamos impulsando y estoy segura que con el concurso y la participación valiosa de cada uno de los parlamentarios de América Latina y El Caribe, podremos concretar en una realidad.
Terminaría deseándoles el mayor de los éxitos para la jornada de estos dos días, para las discusiones que ustedes han elaborado; agradeciendo a cada uno de los presentes su participación, que estoy convencida será amplia, será seria y sobre todo será comprometida.
A mis compañeros, los senadores mexicanos, a quienes hoy han decidido permanecer aquí, fuera de lo que implica nuestra semana de trabajo: al senador Roberto Albores, al senador Aarón Irizar, al senador Miguel Ángel Chico, al senador Manuel Cota, a la senadora Lisbeth Hernández, a la senadora Margarita Flores, a la senadora Sonia Rocha, al senador Gerardo Flores, a la senadora Martha Elena Anaya. A todos ustedes también mi agradecimiento, porque sin duda dan cuenta del compromiso que los mexicanos tenemos con la diplomacia parlamentaria.
Dicen que en el espíritu del Parlamento Latinoamericano se finca nuestro lema: “sin parlamento, no hay democracia”.
Construyamos, pues, entre todas y todos, por medio del diálogo, del conocimiento mutuo, del intercambio de experiencias, una mejor democracia para América Latina y El Caribe; establezcamos hoy, amigas y amigos, una alianza por el cumplimiento de los objetivos de esta agenda, que tendrá que ver con el futuro 20-15, que tendrá que ver con las generaciones no solamente de hoy, sino sobre todo con las del mañana.
Hagamos, pues, que sea esta nuestra mejor consigna y nuestro mejor aporte.
¡Felicidades! Muchas gracias por estar en México!