Versión de la intervención del senador Víctor Hermosillo y Celada, durante la reunión de trabajo de la Comisión de Desarrollo Urbano con representantes de cámaras de la construcción, organizaciones civiles y Cofece para analizar la minuta de la Ley de Obras Públicas.
Como dice el presidente de la Comisión, muchas gracias por asistir.
Hemos estado trabajando arduamente en esta reforma que es muy importante esta ley; si algo se presta a la corrupción son las obras públicas.
El país está desilusionado de las obras que hacemos, estamos muy mal colocados internacionalmente y ha habido escándalos muy graves de obras, que precisamente causan entre los habitantes desaliento, causan desconfianza y le cuestan mucho dinero a la nación.
En estos tiempos que pasamos y que ya tenemos mucho tiempo de que no progresamos a la altura que queremos, definitivamente necesitamos la situación de una buena infraestructura.
En todos los foros que existen de comercio exterior es criticada duramente para poder transportar nuestros productos, nuestra infraestructura.
Cada día crece más nuestra relación internacional, el Tratado de Libre Comercio nos ha puesto en una postura que se ha multiplicado tremendamente nuestra producción industrial y ahorita la industria de la exportación es la que tiene al país en el crecimiento ese raquítico que tenemos, pero crecimiento; la industria nacional está atrasada.
Estudiar esta ley con todas las observaciones que se esgrimieron, algunas muy importantes, precisamente nos hace meditar para estudiar bien la minuta, porque la minuta queremos hacerla con rapidez pero no queremos hacer una cosa mal hecha, la rapidez a veces o las angustias no ayudan al buen resultado.
Esta minuta la tenemos que regresar a la Cámara de Diputados, no es crítica pero muchas de las cosas que están sucediendo aquí pudieron haber sucedido en la Cámara de Diputados y hubieran de una manera muy insustancial, simplificado nuestro trabajo y tener menos repercusiones posteriores cuando regrese a la Cámara de Diputados.
México requiere de una buena ley de obra pública, verdaderamente. Hay muchos escándalos, la ley de obra pública nuestra es complicada, esta que estamos trabajando, pero también va a requerir una cosa muy importante en su aplicación que los diferentes responsables de aplicar la ley de obra pública se la aprendan, se la aprendan.
Es sorprendente las desviaciones que se hacen a nivel federal, estatal y municipal, sobre todo federal y municipal, de concursos en que el que está haciendo el concurso ni siquiera conoce bien la ley de obra pública.
Entonces en esa circunstancia hay infinidad de situaciones de inconformidades, se retrasan los proyectos muchas veces necesarios para el país, se pierden presupuestos y también vienen reclamaciones muy graves a las arcas del gobierno por no haber hecho bien los concursos.
Todos los sabemos, eso sucede y la realidad es que de nada sirve hacer buenas leyes si los que la aplican no están bien enterados de cómo se deben aplicar. No son sencillas las leyes de obra pública, yo fui secretario de Obras Públicas en el gobierno de Baja California, con el licenciado Ruffo, y pues me tuve que aprender bastante las leyes, pero tenía un especialista que aparte era muy poco apreciado por contratistas y todo, porque era demasiado recto, ¿me explico?
Pero a veces los contratistas se pescan de cualquier cosa para inconformarse y muchas veces las empresas tienen mejores abogados que ingenieros, y eso sucede también. ¿Por qué?, porque es un juego difícil con reglas difíciles y ahora con esta situación de la transparencia y todo se va a complicar. Entonces, tenemos que cumplir más requisitos y entonces por eso tenemos que tener una capacitación también.
Esperamos, verdad, pronto sacar la respuesta a la minuta; tenemos prisa más no desesperación.
Muchas gracias por la presencia de todos ustedes y su cooperación.

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