· El priista Moreno Merino declaró la liquidación de la plantilla de edecanes que laboran en el congreso.
· El priista inició una pasarela de al menos 16 jóvenes, quienes desfilaron por la oficina de la Mesa Directiva con atuendos llamativos.
En el Senado de la Republica se inscribió un punto de acuerdo que exhorta al Congreso de Morelos a respetar y garantizar el derecho de las mujeres absteniéndose de promover actos sexistas y discrimatorios en contra de las y los empleados del Congreso. Así mismo se insta a proteger los derechos laborales individuales y colectivos de la plantilla, la promovente fue la senadora Martha Tagle Martínez.
Indica que la petición anterior se derivó debido a que al iniciar la LIII Legislatura, el priista Moreno Merino (Presidente de la Mesa Directiva del Congreso Local) declaró en medios de comunicación que una de las primeras medidas que tomaría sería la liquidación de la plantilla de edecanes.
Posteriormente diversos medios locales señalaron que en menos de un mes el priista inició una pasarela de al menos 16 jóvenes, quienes desfilaron por la oficina de la Mesa Directiva con atuendos llamativos para ocupar las vacantes.
Tagle Martínez aseverá que “nadie puede negar el carácter sexista que tiene organizar una “pasarela” para contratar a personal femenino, principalmente si es con atuendos llamativos”
La integrante de la comisión de Justicia en el Senado subraya que los avances alcanzados en materia de igualdad formal entre mujeres y hombres, no se reflejan de manera directa en la vida cotidiana de las mujeres, los actos sexistas y discriminatorios sigue siendo una constante en el estilo de vida social e institucional.
La legisladora indica que el 10 de agosto que a las edecanes les fue negado el acceso a su área laboral y la única explicación que dieron los guardias en turno fue que las instrucciones habían sido dadas por los diputados sin presentar documento alguno que respaldará la declaración verbal.
Tagle Martínez hace un llamado urgente a las autoridades competentes a erradicar la discriminación de género y a no violentar los derechos laborales consagrados en el artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
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