Versión Estenográfica de la Conferencia de prensa del presidente de la Comisión de la Medalla Belisario Domínguez, senador Roberto Albores Gleason, y de los senadores Sonia Mendoza Díaz y Zoé Robledo Aburto, con el tema “La entrega de la Medalla Belisario Domínguez”.
PRESENTADORA: Buenas tardes, gracias por su presencia.
La razón es una conferencia que va a dar el senador Roberto Albores Gleason; acompañado de los secretarios de la Comisión de la Medalla Belisario Domínguez: la senadora Sonia Mendoza Díaz y el senador Zoé Robledo.
Le dejamos el micrófono al senador.
SENADOR ROBERTO ALBORES GLEASON: Muy buenas tardes a todas y a todos ustedes. Muchas gracias por acompañarnos en este día, por acudir a la convocatoria.
A los medios de comunicación informarles que hace una hora, la Comisión tuvo sesión para dictaminar quién será el galardonado de la Medalla Belisario Domínguez 2016.
Responsabilidad y solidaridad por encima de crisis y afrentas, de antagonismos y malos tiempos, millones de mujeres y hombres de México guían su actividad diaria con la carga de esas palabras; que su trabajo, su esfuerzo y su disposición quedarían huecas de significado. Con ello se construye cada día el presente y el futuro, no pocas veces con un heroísmo anónimo que no trasciende los reducidos límites del entorno doméstico o laboral.
En los campos, en las calles, en las plazas y los caminos transitan silenciosamente millones de héroes, en su momento Belisario Domínguez fue uno de ellos, recibiendo angustiadas madres con sus hijos enfermos que nada tenían que pagar, pero que el médico solidario atendía y curaba.
Con esa misma convicción, promovió la construcción del hospital civil de su ciudad natal, Comitán; y a causa de ello se enfrentó a la corrupción del poder, acusando a las autoridades de haber prometido el bien y no haber proporcionado sino males a la población.
Héroes y heroínas son los que ofrecen comida y consuelo a los migrantes, lo que salvan a sus semejantes de las llamas, los que comparten sus conocimientos para dar futuro a los infantes. Todos recordamos el caso ocurrido en 1907, cuando el maquinista Jesús García Corona salvó al pueblo de Nacozari, Sonora, de la embestida de un tren cargado con explosivos, a cambio de su propia vida.
De esa altura es la acción de Gonzalo Rivas Cámara, el trabajador de una gasolinera en Chilpancingo, Guerrero, quien responsable y humanamente solidario impidió que el 12 de diciembre de 2011 las llamas producidas por el incendio de una bomba se extendieran a los depósitos de los combustibles, cuya explosión hubiera significado cientos de muertos y heridos.
Gonzalo cerró las válvulas de seguridad, tomó un extinguidor y se dirigió a apagar el fuego; pero quedó bañado en gasolina ardiendo. Agonizó durante veinte días. Rivas Cámara, ingeniero en sistemas, originario de Veracruz, falleció a los 48 años el 1 de enero de 2012 a causa de las quemaduras.
Su muerte salvó la vida de muchos de sus compatriotas, prestándoles a la patria y a la humanidad un servicio invaluable, una muestra indiscutible de eminente virtud.
El sacrificio de Gonzalo Rivas, encarna uno de los rostros más valiosos de la realidad nacional: el de la solidaridad cotidiana, la que explica que sigamos adelante día con día, la que no arredra ante los desafíos ni las inseguridades.
Ese México que sirve a los otros desinteresadamente, con ánimo y valentía, cuyos rasgos se concretan en la diversidad de una población incansable y una ciudadanía activa. Ese país capaz de unirse y no caer en la indiferencia y la apatía; el México al que deben exaltar las instituciones de la República.
La acción de Gonzalo y el alto precio que pagó por su ayuda, posiblemente hubieran sido olvidados a los pocos días, alguna nota periodística que al cabo de la sucesión vertiginosa de los hechos que escriben nuestra historia contemporánea, hubiera quedado sepultada y condenada a la ignorancia de sus propios deudores; como acontece en la mayoría de las valientes acciones de los héroes anónimos mexicanos.
No fue así. Él tesón, la obstinación, el compromiso de otro mexicano no impidió; Luis González de Alba nos lo recordó cada semana durante varios años, convencido de que si había un mexicano digno de recibir altos honores de la patria y el reconocimiento de sus conciudadanos era Gonzalo Rivas Cámara.
González de Alba sabía también muy bien los sentidos profundos de ser responsable y solidario, como dirigente estudiantil en el 68, como escritor, divulgador de la ciencia y polemista, nunca abandonó hasta su muerte reciente su idea de contribuir a hacer de la nuestra una sociedad mejor sobre los principios de la diversidad, la divulgación del conocimiento y el disfrute de la igualdad de derechos.
Con su propio puño expresó, como un mexicano más de los conmovidos por el acto de heroísmo del trabajador Gonzalo Miguel Rivas Cámara a la altura de Jesús García, héroe de Nacozari, propongo para este héroe de Chilpancingo el más alto reconocimiento de la República.
A esa voz se sumaron otras que de distintos ámbitos sociales proclamaron la estatura moral, cívica y ética de quien, en palabras del escritor Guillermo Sheridan, no se detuvo a calcular riesgos ni a sopesar alternativas. Erradicó su instinto de supervivencia y puso en su sitio un impulso moral que en un instante de insondable lucidez lo llevó a hacer una transacción debida con la muerte: la muerte suya por la vida de los prójimos.
En lo atención a lo manifestado y, de acuerdo con lo establecido en el decreto de creación de la Medalla Belisario Domínguez, esta Comisión propondrá al Pleno del Senado que la Medalla Belisario Domínguez 2016 sea otorgada sea otorgado a Gonzalo Miguel Rivas Cámara post mortem.
Gonzalo Rivas es el anhelo cívico de un México ético y consecuente con las demandas de la sociedad desde las distintas voces que conforman el coro nacional. Es un héroe de dimensiones civiles que en carne en su naturaleza, aspiraciones y reclamos de una multitud silenciosa, pero de firmes convicciones.
Con esa determinación, se reconoce el valor, la solidaridad, la entrega, el amor de los mexicanos y mexicanas que en heroica lucha diaria permiten el avance del país y la permanencia de los principios que nos dan sentido como nación.
Se reconoce a los ciudadanos y ciudadanas honrados y dignos, y además valientes.
“Los cobardes mueren muchas veces antes de su verdadera muerte; los valientes conocen el sabor de la muerte sólo una vez”, dijo William Shakespeare.
De esa talla fue Belisario Domínguez; de esa talla han sido los héroes anónimos de todos los días.
Muchas gracias.
PREGUNTA: Presidente de la Comisión, para usted, dado que Belisario Domínguez fue una víctima del usurpador Huerta, pero Belisario Domínguez también garantizó la libertad de expresión. ¿Qué reflexión deja, además de este reconocimiento a quien se debe, el hecho de que recientemente con la denominada Ley de Réplica se buscara atentar contra la esencia del espíritu de Belisario Domínguez?
Y le recuerdo que allá por el año 94 aún, otros colegas fueron hasta la antigua Casona de Xicoténcatl a poner un tapón a Belisario Domínguez para que nunca ninguna fuerza política atentara contra un derecho consumado en este país, que es la libertad de expresión, como lo muestra el artículo 6º constitucional.
SENADOR ROBERTO ALBORES GLEASON: Totalmente de acuerdo contigo.
Una lucha permanente hacia la libertad expresión, hacia la libertad y a la lucha de igualdad y prosperidad. Y en eso nosotros estaremos siempre cuidando los principios que, como tú bien lo dices, los señaló a lo largo de su vida y con su trágico asesinato, el prócer Belisario Domínguez.
PREGUNTA: Yo quisiera preguntarle sobre el tema de Ayotzinapa, las resistencias que han venido principalmente del abogado, por ejemplo, de los padres que están buscando a los jóvenes desaparecidos.
Ellos más o menos insinúan que esto es un golpe contra la normal, contra los normalistas, dado el involucramiento que algunos de ellos tuvieron precisamente en el incendio de esa gasolinera.
¿Qué mensaje les mandaría a estos que han hablado así y que se han opuesto diciendo que se está criminalizando a los normalistas?
SENADOR ROBERTO ALBORES GLEASON: Bueno, el mensaje es de que es absolutamente falsa esa interpretación.
Nosotros estamos calificando lo que nosotros llamamos un héroe anónimo, un acto heroico, no estamos haciendo tal lectura, sino el reconocer a Gonzalo Rivas con todas sus palabras y como ya lo expuse en mis palabras iniciales, otorgarle la Medalla Belisario Domínguez.
REPORTERO: Justamente más o menos en ese sentido también iba mi pregunta o va mi pregunta, si no es esto una provocación para los normalistas de Ayotzinapa, que justamente argumentaban eso.
SENADOR ROBERTO ALBORES GLEASON: Reitero, nosotros estamos reconociendo y propondremos al pleno del Senado que la medalla post mortem sea para Gonzalo Rivas y no tiene ningún mensaje más que el de señalar este acto heroico, que salvó miles de vidas y que creo que la Medalla Belisario Domínguez, como lo hemos visto en los distintos años, que se ha otorgado la medalla, reconoce a mujeres y hombres de distintas trincheras, de distintos ámbitos y nosotros consideramos que también es meritorio para esta medalla otorgársela a un héroe civil anónimo que dejó su vida para defender la vida de sus compatriotas.
El jueves 24 de este mes será la ceremonia de la entrega Medalla Belisario Domínguez 2016, será a las 12:30 horas en la antigua casona de Xicoténcatl.
Muchas gracias.
REPORTERO: ¿Estará el presidente, perdón?
SENADOR ROBERTO ALBORES GLEASON: Sí.
Finalmente, aquí a Beatriz le hago entrega del dictamen por si alguien lo quiere consultar, ahí está toda la información.
Muchas gracias.