- El fenómeno no se ha considerado en la agenda del país, pese a las cifras.
- Por violencia más de 281 mil personas han sido desplazadas en el territorio nacional.
- México con mayor número de desplazados internos, por encima de países como Palestina y Guatemala.
La Presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la República, Gabriela Cuevas Barron, dio la bienvenida a la Cámara Alta al Relator Especial sobre los Derechos Humanos de los Desplazados Internos de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Chaloka Beyani.
“Cuando el Senador Zoé Robledo y yo decidimos buscar su presencia doctor Beyani aquí en el Senado de la República fue por dos razones muy importantes, una porque consideramos que el problema del desplazamiento interno no se ha visualizado en la agenda de nuestro país. Es México el primero que está dejando invisible a sus ciudadanos.
Y en segundo lugar, porque es urgente legislar en esta materia. El primer paso que nosotros como legisladores debemos dar es que se entienda lo que está sucediendo con las personas internamente desplazadas, cuál es la problemática que están enfrentando todos los días y cómo desde la ley podemos lograr que se hagan por fin políticas públicas para aliviar este sufrimiento”, destacó la Senadora.
Durante la reunión que tuvo lugar en la sede de la Cámara Alta, la legisladora Cuevas Barron señaló que "pensar que el fenómeno de desplazamiento forzado es un dogma de fe en el que hay que creer o no, es absurdo, las cifras, las historias y los nombres están a la vista".
De acuerdo con datos de la organización Internal Displacement Monitoring Centre (IDMC), utilizando datos actualizados al 2014, México tenía 281,418 personas desplazadas, ocupando el número 26 de los países con mayor número de desplazados internos, por encima de países como Palestina y Guatemala.
Ante esta situación, la Presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, Gabriela Cuevas, mencionó que “uno de los problemas aquí en México tiene que ver con una inmediata asociación entre decir desplazamiento interno y fenómenos de guerra o de conflictos armados, cuando no siempre sucede así, son muchas las causales que motivan el desplazamiento forzado de personas”.
“Y si no vamos quitando estos tabús y nos metemos a fondo a ver cuáles son las causas y cuáles con también los problemas que enfrentan estas personas; cerrar los ojos no nos va a ser mejores políticos, no va a hacer mejores leyes y mucho menos va a generar políticas públicas”.
Por ello, Gabriela Cuevas insistió que “es urgente una legislación que atienda a los miles de mexicanos que hoy, por causas desde fenómenos naturales, problemas religiosos, crisis económicas y por causas relacionadas a la violencia se ven forzados a dejar sus hogares, a dejar sus comunidades, a que los niños tengan que abandonar las escuelas, a que salgan huyendo de lo que siempre fue su hogar”.
La Presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores puntualizó que uno de los temas de relevancia sobre este asunto, tiene que ver con las mediciones del desplazamiento interno, por lo que sugirió que “sería muy interesante lograr con usted o con su sucesor establecer un criterio más amplio sobre cómo llevar a cabo estas mediciones que nos permitan tener criterios mucho más uniformes y tomar en consecuencia mejores decisiones”.
La Senadora reiteró el compromiso del Senado de la República para trabajar juntos porque “nos interesa que México tenga un mejor desempeño en la agenda humanitaria, porque como usted bien lo señaló, son nuestros ciudadanos y son nuestra responsabilidad”.
Debe mencionarse que de acuerdo con información de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el fenómeno de desplazamiento interno afecta a por lo menos 27 entidades a causa principal de la violencia provocada por el crimen organizado. Conforme a datos de la ONU, en 2015, 65.3 millones de refugiados y desplazados fueron obligados de dejar sus hogares o sus países de origen por las guerras o por ser víctimas de persecuciones. De esta forma, en el mundo, una media de 24 personas fueron desplazadas de sus hogares cada minuto de cada día –unas 34 mil personas al día-, frente a 30 personas por minuto en 2014 y 6 en 2005.
Es importante mencionar que es la primera visita que en 16 años realiza un Relator de Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos de los Desplazados Internos.
(Versión de la participación de la senadora Gabriela Cuevas Barron, durante la reunión con el relator Especial de la ONU sobre Derechos Humanos de los Desplazados Internos, Chaloka Beyani)
Doctor Beyani, nos da mucho gusto tenerlo en el Senado de la República.
El Senado de la República, la casa de la política exterior; es facultad exclusiva del Senado de la República. Y es por ello, que para nosotros la agenda no sólo de política exterior sino todo lo que compete a la responsabilidad que tiene México en el mundo y, por supuesto, con nosotros mismos resulta fundamental.
El día de hoy tenemos con usted una reunión, me parece, particularmente buena. Nos acompaña el senador Manuel Cárdenas, también. Ya hizo uso de la palabra el senador Zoé Robledo y, por supuesto, también el senador Enrique Burgos. Somos todos de distintos grupos parlamentarios; aquí se encuentra una importante pluralidad política.
También, como uno de los rasgos importantes de esta reunión, se encuentra el doctor Edgar Corzo, quien es el Quinto Visitador de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y también me da mucho gusto presentar a distinguidas personas que conocen mucho más que nosotros los senadores sobre estos temas: Laura Rubio, que ya estuvo presentando un libro sobre esta materia aquí en el Senado de la República; José Antonio Guevara, también un importante especialista en esta materia y que viene por parte de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos. Y Santiago Corcuera, que últimamente se está volviendo parte del inventario del Senado de la República, que es integrante del Comité contra la Desaparición Forzada, y con quien además, debo decir, que esta semana tenemos particularmente buenas noticias, porque juntos presentamos una iniciativa para modificar nuestra Constitución y hacer del artículo 11 constitucional un artículo acorde a los tratados internacionales en materia de derechos humanos de los que México es parte.
Esto es muy importante y muy debatido ahora en el mundo los temas de asilo y de refugiados. Entonces, estamos inaugurando un artículo en materia humanitaria muy importante. Apenas hace dos días entró en vigor, el martes entró en vigor y estamos muy contentos, por eso nos da mucho gusto la constante participación de Santiago.
Y, también, se encuentra Miriam Morales, por parte de la Comisión de Atención a Víctimas. Así que es una mesa muy plural, no sólo los representantes políticos sino también los representantes de instituciones muy destacadas y de organizaciones que han trabajado en esta materia.
Cuando el senador Zoé Robledo y yo decidimos buscar su presencia, doctor Beyani aquí en el Senado de la República, fue por dos razones muy importantes: una, porque consideramos que el problema del desplazamiento interno no se ha visualizado en la agenda de nuestro país. Es México el primero que está dejando invisible a sus ciudadanos.
Y, en segundo lugar, porque es urgente legislar en esta materia.
El primer paso que nosotros como legisladores debemos dar es que se entienda lo que está sucediendo con las personas internamente desplazadas, cuál es la problemática que están enfrentando todos los días y cómo desde la ley podemos lograr que se hagan por fin políticas públicas para aliviar este sufrimiento.
Me parece que uno de los problemas aquí en México tiene que ver con una inmediata asociación entre decir desplazamiento interno y fenómenos de guerra o de conflictos armados, cuando no siempre sucede así, son muchas las causales que motivan el desplazamiento forzado de personas.
Y si no vamos quitando estos tabús y nos metemos a fondo a ver cuáles son las causas y cuáles son también los problemas que enfrentan estas personas; cerrar los ojos no nos va a ser mejores políticos, no va a hacer mejores leyes y mucho menos va a generar políticas públicas.
Pensar que el fenómeno de desplazamiento forzado es un dogma de fe en el que hay que creer o no, es absurdo.
La ciencia, las mediciones son muy claras. El libro de la doctora Rubio es muy bueno en esta materia. La CNDH también ya ha hecho un estudio al respecto. Así que, insisto, no es un dogma de fe; es un problema que aqueja a miles de mexicanos y mexicanas, y en el que, por supuesto, los más vulnerables son los niños y niñas.
Hay mucho que nosotros debemos hacer todavía en materia de derechos humanos, doctor Beyani. Hemos avanzado. En el año 2011 se hizo una reforma constitucional, la más importante en la historia de nuestro país. Hemos, también, avanzado en una agenda legislativa en muchas de estas materias, por supuesto que hay algunas que todavía siguen pendientes. Pero me parece que estamos dando pasos en materia legislativa en la dirección correcta.
Sin embargo, si no logramos que la problemática que vive México en materia de derechos humanos se convierta en una causa para todos --gobierno en todos sus aspectos, legisladores, sociedad, instituciones-- difícilmente saldremos de la terrible coyuntura en la que nos encontramos y que está teniendo un saldo muy doloroso para miles de personas.
Su presencia aquí nos da pues mucha luz en el sentido de que este tema es importante no sólo para México sino también para las instituciones internacionales.
Sabemos que son muchos los fenómenos de desplazamientos forzados que se deben atender en el mundo, sabemos que las crisis son apremiantes que no dan descanso ni tregua, pero también sabemos que en México estamos en un muy buen momento para prevenir, para solucionar las casusas y, sobre todo muy importante, para atender las consecuencias y poder apoyar a estos miles de personas.
Hace ya --me parece-- varios meses, sino es que me atrevería a decir incluso un par de años, presenté una iniciativa para que nuestra Constitución permita al Congreso de la Unión legislar en materia de desplazamientos forzados.
Al ser un fenómeno relativamente reciente no está especificado en la Constitución que esta sea una materia del Congreso de la Unión. Hay ciertos debates, hay quienes nos dicen que no se requiere la reforma constitucional, hay quienes dicen que sí, no lo sabemos, aquí los abogados nos tendrán también que dar su opinión.
Pero lo que sí sabemos es que es urgente una legislación que atienda a los miles de mexicanos que hoy se ven forzados por causas desde fenómenos naturales, problemas religiosos, crisis económicas y por causas relacionadas a la violencia se ven forzados a dejar sus hogares, a dejar sus comunidades, a que los niños tengan que abandonar las escuelas, a que salgan huyendo de los que siempre fue su hogar.
Muchas gracias doctor Beyani por estar aquí con nosotros en el Senado de la República. En México nos gusta siempre decir que se sientan como en su casa. Esperemos que en esta reunión verdaderamente seamos capaces de hacerlo sentir como en su casa porque queremos que esta sea la primera de muchas reuniones.
Bienvenido a México y bienvenido al Senado de la República doctor Beyani.
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